Jamás te olvidaré, Neko. Has formado parte de mi vida durante algo más de 16 años. Nos has dado tanto amor y cariño que siempre te llevaremos en el corazón. Una parte de mí está feliz, porque te llevas tanto amor desde aquí… Te echaré de menos, te echo de menos. Te quiero, mi Nekito. Algún día volveremos a vernos, ese día dormiremos juntos de nuevo y te daré un trocito de jamón del que te gusta tanto.