Desde que te fuiste el mundo es un poco más gris, un poco más frío y mucho más triste.
La casa sin ti, la ropa sin pelo y la furgo sin babas, no sabes cuánto extrañamos todo de ti.
Nos quedamos con que nos hiciste mejores personas, con tu amor y tu apoyo incondicional, con todas las veces que nos rescataste de la soledad y con tu último regalo, un precioso arcoíris para que poco a poco le pongamos color a este mundo gris.